Estudios recientes indican que alimentos como el café, el vino, la miel, el salmón, los vegetales verdes y los tomates, así como la leche, la manzana, los frutos rojos, entre otros, son determinantes para prevenir los efectos de la edad.
Y es que estos alimentos contienen propiedades, vitaminas y nutrientes que ayudan en las distintas funciones orgánicas que intervienen en el proceso de envejecimiento.
Por ejemplo, los nutricionistas hablan de las bondades de la leche, que en la actualidad forma parte de la dieta diaria de chicos, adultos y adultos mayores, por la gran cantidad de vitaminas D y K, además del calcio que posee y que ejerce una misión en prevenir la degradación de los huesos.
La lista es muy larga. La misma incluye productos reconocidos, tales como: la soya, el brócoli, las espinacas; y algunos coloridos, como son: el tomate y la auyama.
Los frutos rojos, entre ellos: las fresas, frambuesas y las cerezas, son también muy sustanciales debido a su alta concentración de nutrientes que tienen mucho que ver con retardar la aparición de arrugas.
Entre los alimentos que se señalan como aliados en la lucha eterna de retrasar el proceso de envejecimiento hay algunos que tradicionalmente han sido considerados como dañinos, porque contienen alcohol -en el caso del vino tinto-, o cafeína –con relación al café-.
Las investigaciones recientes han desmitificado esas creencias y hoy en día ambas exquisiteces pueden degustarse sin el menor remordimiento, ya que no sólo son vitales como alimentos entivejez, sino que, además, está demostrado que ejercen una función rehidratante, por su alto contenido de agua.
A todas esas investigaciones, los nutricionistas locales dan fe. El doctor Ricardo Kohler, de Forma Vital, afirma que casi todos los productos que se señalan contienen antioxidantes, nutrientes, vitaminas, minerales y oligoelementos, que ejercen un papel específico en el adecuado funcionamiento del organismo, ya que trabajan directamente sobre determinados órganos que intervienen en el proceso degenerativo.
“Hay alimentos, como el té verde, que tienen miles de años consumiéndose, por la riqueza de propiedades que benefician al cuerpo humano. También el vino contiene policenoles que intervienen” , dice el perito.
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